Joel se encuentra de nuevo en Suiza impartiendo conferencias. Participa en cultos y grupos de confirmandos, dónde cuenta sobre nuestro proyecto, haciendo reflexionar a la juventud al contar la historia de su vida.
De esta manera, el eficaz equipo de obreros de Joel pudo convertir una cabaña de madera derroida en una vivienda sencilla pero digna, para una familia de ocho miembros, que vivía en un estado lamentable. El nuevo hogar es un gran desahogo para esta amplia familia que, además de tener que superar dificultades en su dura rutina diaria, se ven enfrentados al difícil cuidado de uno de sus hijos que padece una enfermedad psíquica.